Alguna vez lo hemos hecho, pero es un riesgo que va más allá de una multa, el llevar el brazo apoyado en la ventana cuando está bajada o, incluso, por fuera del vehículo.
En España, conducir con la mano en la ventanilla supone una sanción de 80.-€, ya que se entiende que el conductor está circulando “de manera negligente” (artículo 3.1 del Reglamento General de Circulación) o que no está “en condiciones de controlar su vehículo” (artículo 17.1) al no tener las dos manos sobre el volante, imprescindible para maniobrar lo más rápido posible en una situación de emergencia.
Pero es que además en caso de accidente, si se circula con la mano en la ventanilla puede provocarnos daños irreparables en el brazo, ya que puede acabar:
1.- Amputado, si es seccionado por cualquier otro elemento inmerso en el choque. Pero si los servicios de emergencia actúan con rapidez y eficiencia la extremidad puede ser reincorporada.
2.- Aplastado, lo que es mucho peor, ya que es muy complicado recuperar la movilidad original en el brazo.
Fte: Autopista.es